Presentada la finalización del misterio de Miñarro y los ropajes de David Calleja para el Soberano Poder
El Teatro Auditorio Riberas del Guadaíra fue testigo en la noche de ayer de la inauguración y presentación de la exposición “Soberano Poder, su paso de misterio”, una exposición en la que han querido mostrar la culminación de un largo y bonito sueño, como ha sido la ejecución de todas las imágenes que componen el misterio.
A la presentación acudieron los grandes artífices de que la Hermandad del Soberano Poder posea este magno paso de misterio: Juan Manuel Miñarro y el portuense David Calleja, escultor de las imágenes del paso el primero y bordador y diseñador de los ropajes el segundo. Una presentación que estuvo acompañada musicalmente por el trío de música de capilla de Nuestra Señora del Dulce Nombre.
La escena inunda el hall de entrada del Riberas del Guadaíra. Caifás le pregunta al aíre, el soldado no sostiene la cuerda del que va a morir, Anás tiene una vana preocupación, y José de Arimatea intenta socorrer al que falta en la representación: el Soberano Poder. Todo está dispuesto como iría sobre el paso el Miércoles Santo. Incluso los candelabros del paso del Señor están presentes.
De todas las imágenes la que destaca es José de Arimatea, la nueva talla y la que completa definitivamente el misterio. Es una imagen cuya cara refleja la preocupación por el juicio a Jesús, quizás preso de el parentesco que le une al que están condenando -un cartel explicativo de la propia exposición arroja luz sobre este tema y señala que José de Arimatea es el tío abuelo de Jesús-.
En cuanto a los ropajes, podríamos quedarnos con el de Caifás, lleno de color y símbolos. Por ejemplo, de la sobretúnica penden varias campanitas y cristales en forma de granadas, o la pieza que cuelga del cuello y que descansa en el pecho en el que se representan las doce tribus de Israel.
Durante la presentación del acto, que estuvo dirigida por Jaime Otero -capataz del paso del Señor-, quien repasó las vidas artísticas de Calleja y Miñarro, y que echó la vista atrás para recordar cómo comenzó todo en el año 2005, tomaron la palabra los dos artistas, imaginero y bordador.
El profesor Miñarro destacó la importancia de todas las imágenes del paso, ya que para él “ninguna de las imágenes era secundaria, porque todas tenían su función y su importancia dentro del pasaje evangélico que representa este paso de misterio”. Asimismo, también señaló cómo pese a que son varias las tallas que hay sobre el paso, la importancia siempre la tomaba Nuestro Padre Jesús del Soberano Poder, porque todos los movimientos de las imágenes secundarias iban dirigidos al Señor. Así vemos cómo Caifás se dirige hacia Él mirándolo directamente, la actitud del soldado que lo retiene y lo empuja, o la mano de José de Arimatea que lo señala.
Por último, Juan Manuel confesó haber vivido un auténtico sueño junto a la Hermandad del Soberano, algo que también le ha permitido sentir una cercanía con los hermanos de Pablo VI que según él únicamente había sentido con la Hermandad del Cerro del Águila en sus comienzos, con la que Miñarro hizo varios nexos de unión como la fuerza de un barrio o la juventud de los componentes de la Hermandad.
A continuación fue David Calleja el que dedicó buenas palabras a la Hermandad, aunque él únicamente destacó “la originalidad de este paso de misterio”. Para el artista de El Puerto de Santa María era fundamental buscar una identidad propia para la cofradía alcalareña, huyendo de los tópicos y los clásicos cánones ya escritos para vestir a las imágenes secundarias, algo que Calleja definió como “uniformes para soldados o uniformes de los miembros del Sanedrín”.
Por último, y tras las palabras de agradecimiento de Jesús Torres, hermano mayor del Soberano Poder y que entregó sendos recuerdos a los artistas, tomó la palabra el Alcalde de la Ciudad, Antonio Gutiérrez Limones, quien recordó que habíamos sido unos afortunados por asistir al nacimiento de una nueva Hermandad en Alcalá, algo de lo que debíamos estar profundamente orgullosos.
